Unas jornadas formativas que demuestran, una vez más, que Somos Futuro
Más de 270 animadores voluntarios de la Federación Valdoco disfrutaron el pasado sábado 21 de septiembre en la Casa Salesiana de Atocha, de las jornadas de formación del IEF de la Inspectoría SSM.
El día comenzó con la bienvenida por parte del Delegado de Pastoral de la Inspectoría, Xabier Camino, que compartió todo lo vivido en el verano salesiano e introdujo la nueva campaña pastoral “Somos Futuro”. A continuación, tuvieron lugar los testimonios, en primer lugar, Carlos Segovia, animador de Carabanchel (Madrid), que habló del vínculo en el Centro Juvenil: una comunidad de referencia en salida, con todos y con todo. Tras esta primera charla, los animadores tuvieron un momento de grupo donde pudieron compartir qué supone para ellos el Centro Juvenil. Tras esto, dio paso a un segundo coloquio, esta vez fueron Álvaro Sierra y Marina Torres, animadores de CJ Las Aves de Aranjuez y voluntarios misioneros los que hablaron de su experiencia centrándose en “Cuidarnos para cuidar, acompañamiento y proyecto de vida”. Y se cerró la mañana volviendo a los grupos para compartir la importancia del acompañamiento y del discernimiento en sus vidas.
la importancia del ser y estar
Tras la comida y la foto grupal, la tarde consistió en dos momentos formativos de especial sensibilidad y necesidad en nuestros centros, que se basaban en Atención a la diversidad, Sistemas de Protección de la Infancia o el Proyecto “Somos Casa” animado por Salesianos Vitoria-Gasteiz.
Para acabar la jornada, concluimos con una celebración y la cena preparada por el CJ Atocha-Madrid; disfrutando de un rato juntos. Tras este momento, los animadores partieron a sus lugares de origen.
Un día inmejorable, que nos recuerda la importancia de la formación en nuestros animadores y que los centros juveniles están con más vida que nunca, porque si algo quedó claro ese sábado, es que, desde luego, Somos Futuro.
¿Qué te pareció el encuentro?
nos lo cuentan:
«Es muy bonito el encuentro de los diferentes centros juveniles de la inspectoría para recordar que no estamos solos. Pero, también, lo es por la utilidad de esas píldoras formativas. Da igual que lleves un año de animador, que si llevas seis siempre aprendes algo nuevo. Este año las propuestas me han parecido muy buenas y útiles y las personas que las ofrecían muy bien formadas.»
Christ de CJ Don Bosco Guadalajara.
«El IEF es una experiencia muy enriquecedora que te proporciona una guía para el curso que empezamos. También es una buena oportunidad para conocer a otros animadores de otros Centros Juveniles que nos pueden aportar nuevas perspectivas sobre la manera de hacer las cosas. Este año hemos podido aprender y disfrutar de algunos testimonios que son fundamentales para entender porqué nos dedicamos a esto. Y también varias formaciones que nos hacen mejorar en muchos aspectos y nos ayudan a seguir creciendo cada vez más. Es algo necesario tanto para los animadores que empiezan como para los que ya llevamos tiempo y es de agradecer que se siga realizando cada año.»
Ángela de CJ Savio (Madrid)
«El IEF aparte de suponer un punto de reencuentro con gente de otros Centros Juveniles, es esa formación necesaria al inicio de cada curso para recordarnos, por si se nos olvida, por y para qué estamos aquí. Que es para los chavales como decía Don Bosco y para educarles y evangelizarles en la Palabra de Dios.»
Sofía de CJ Maux (Salamanca)
«Es una jornada muy especial donde nos podemos encontrar con otros Centros Juveniles a quienes no veías desde hace tiempo y donde se puede compartir cómo se hacen las cosas en los distintos Centros de la inspectoría. También es un momento único para aprender y recibir formación de temas que están muy presentes en nuestros centros juveniles.»
Gonzalo de CJ Paseo (Madrid)